lunes, 19 de septiembre de 2016

¿Qué tramáis, El País?

En las últimas semanas el periódico español El País ha sacado una serie de sospechosos artículos que parecen querer decirnos algo... Son los siguientes:

  • En primer lugar un artículo que cuestiona las horas de sueño del trabajador:



El País nos pregunta por qué no trabajamos a las 4 de la mañana. Y para ello nos lo vende de la siguiente forma:


Es algo a lo que nadie te obliga, es la hora perfecta y se está poniendo de moda. Desde luego parece todo un lujo trabajar a las 4 de la mañana... Si no fuese porque prefiero dormir a esa puta hora para no tener que estar durmiendo a las 8 de la tarde. 


Ah bueno, que solo trabaja dos horas, luego te puedes ir y volver a las 10 de la mañana... Está perfecto si no fuese por el detalle de que dudo muchísimo que en la inmensa mayoría de trabajos una vez que entres te dejen salir a las 6 de la mañana para volver a las 10. 


¿Dormir cuatro horas? Claro, así sí que cuadran las cuentas. Además nos dicen que es de las dietas de sueño menos radicales, por lo que si quieres ser un triunfador supongo que podrás reducirla a 2 horas diarias, ¿no? Todo sea por el bien de la empresa, por supuesto...


Este señor considera un mito lo de las 8 horas de sueño, cuanto menos se duerma mejor. Total, si luego el cansancio o la fatiga causan accidentes la culpa será para el trabajador, por lo que, ¡qué le importará a él!


Ah, bueno. Si lo hace Michelle Obama quien seré yo para contradecirla... pues nada, todos a dormir 4 horas al día como hace Michelle Obama que seguro que lleva unas exigencias y rutina de trabajo similar a la mayoría social del país. 

  • Unas semanas después nos llega este otro artículo también relacionado con la productividad en el trabajo:


No contento con vendernos lo bonito que es para el trabajador dormir poco si con ello somos más productivos para la empresa, pasan a la siguiente fase que es "consume drogas para ser más eficaz"


Pero oye, no piense usted, señor emprendedor, que te vas a convertir en un sucio hippie de aquellos. Para nada, lo que estás haciendo es aumentar el rendimiento y la eficacia. No te convertirás en un rojo perroflauta por consumir LSD, sino en un emprendedor modélico, por lo que no tiene nada de lo que preocuparse. Además, lo utilizan las "compañías de más alto nivel del mundo", por lo que, de nuevo, quienes somos nosotros para contradecir a "las compañías de más alto nivel del mundo". Por último, se toma en dosis tan pequeñas que hasta se llaman microdosis. Por tanto, parece que no tenemos nada de lo que preocuparnos y cualquiera puede convertirse en el trabajador modélico para la empresa (porque eso de que consumamos drogas, de que puede que necesitemos ir aumentando las dosis al consumirla con frecuencia, de que puede tener consecuencias muy graves para la salud o de que sea ilegal, son hechos menores y que, lo más importante, no le importa lo más mínimo a la empresa). 


Pues eso, que ya estamos tardando en sustituir las cafeteras de la empresa por máquinas expendedoras de LSD. 

  • Y por último, si por lo que fuera estos consejos no te sirviesen para captar la atención de tu jefe y fueses el seleccionado en el próximo ERE, no hay problema, El País también tiene un artículo para ti:




Porque parece que también es 'cool' y moderno comer de la basura. ¿Como no va a 'molar' comer de la basura si hasta le han puesto un nombre? Se llama 'freeganismo'. Con ese nombre no hay dudas de que estamos tardando en probarlo... Como comenta El País, la gente que lo práctica tiene "la nevera llena" y con "comidas riquísimas", y eso que no aún no es una freegana total, que si no... 
Es que no sé para que vais a querer mejoras salariales o por qué os rompéis la cabeza haciendo malabares con las cuentas del hogar, cuando de la basura de come "riquísimo" y barato. Es que luego hasta os indignaréis con noticias como estas:


Cuando según El País podrían mandar a los 600 a comer a la basura, que está riquísimo. 

En definitiva, creo que ha quedado bastante claro que El País intenta vendernos a través estos y otros artículos similares hechos absolutamente negativos para la clase trabajadora como algo moderno y de moda. Si necesitas rebajarte por la empresa a costa de tu salud o tus derechos, piensa que es algo que "los más grandes" ya hacen, por lo que ni lo dudes. Y si ves por la calle a alguien comiendo de la basura, piensa que simplemente se trata de un 'freegan'. Esta es la ideología basada en la sumisión que este y otros medios de comunicación quieren transmitir a la sociedad a través de bochornosos artículos.


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